30 de abril de 2021

“El día que no tengamos un conflicto será porque entramos en una meseta”

Nadia Nazer, actual directora de la agencia de comunicación NZR, reflexionó sobre la trayectoria de la empresa y los desafíos del particular último año.

¿Cómo fue gestionar la agencia en un año con tantas contingencias como el 2020?

La particularidad, como en todos los negocios, es que lo que habíamos proyectado en diciembre de 2019 quedó totalmente eliminado. Cambiaron los objetivos, los presupuestos, las formas de comunicar y hubo que repensar cada una de las estrategias de comunicación en función de las decisiones de cada uno de nuestros clientes y a los ajustes de los presupuestos.

En la forma de trabajo lo que más cambió fue la virtualidad. Nosotros tenemos reuniones regulares con clientes, con algunos semanales y con otros quincenales. Ahora todo es Zoom. Nos acomodamos y nos acostumbramos bastante a esta forma de trabajo. Lo que sí nos dio de positivo fue una mayor periodicidad. Parece que es mucho más fácil encontrarse a través de videollamadas, con lo que el seguimiento se vuelve mucho más fácil.

¿Tuvieron alguna caída en la actividad como ocurrió en otros rubros?

Naturalmente, al principio cayó la actividad hasta que nos acomodamos. Algunos rubros redujeron sus inversiones y otros no. Tuvimos clientes que fueron a cero en facturación durante meses y nos pusieron un stop en la planificación que teníamos. Hubo clientes nuevos que aparecieron solamente por 2020 y otros más moderados que regularon sus pautas. Estratégicamente se pensaron planes con inversiones más pequeñas. Siempre creemos que la marca se construye en el largo plazo.

¿Cuál fue la clave para mantenerse vigentes a lo largo de estos últimos 33 años?

La vigencia de la empresa entiendo que tiene que ver con el equipo de profesionales que somos, la fortaleza que hay entre los que lideramos hoy la agencia y la llevamos adelante, ese poder atravesar las distintas tormentas, no solo las económicas, sino las internas y las de la industria. Este barco siempre siguió flotando y navegando. Entiendo que el pilar es el equipo, la confianza que tienen los clientes en nosotros. En 33 años han pasado muchísimas empresas y siempre hemos dado lo mejor que teníamos en cada momento, con valores y ética profesional.

¿En qué consiste la campaña Transparencia?

Transparencia surgió en función a este nuevo aniversario, luego de haber trabajado en pandemia durante un año. Queremos transmitir que nuestros valores y forma de trabajar siguen intactos desde nuestros comienzos. Nuestro slogan es “Confía en mí” porque entendemos que la comunicación se basa mucho en la confianza, en crear vínculos, entender al otro y la transparencia es eso. Transparencia en los objetivos de ambas partes y transparencia en los tiempos que proponemos. Es nuestra forma de mostrar 100% nuestra forma de trabajar sobre una base de valores, profesionalismo, ética, confianza y vínculos a largo plazo.

¿Cómo planifican este 2021?

La planificación para 2021 fue con mucha cautela. Intentamos seguir construyendo marca con nuestros clientes y con nosotros. Queremos seguir construyendo nuestra marca en Rosario y afuera. Estamos dando nuestros primeros pasos en España, entonces, de alguna manera esa construcción de marca que acá llevó 33 años, allá está recién comenzando. Eso es un gran proyecto que tenemos para este 2021.

¿Fue este último año el más complicado que recuerdan al frente de NZR?

Momentos complicados se viven muchas veces y por muchos motivos. Los servicios, al no ser un commodity, dependen mucho de las personas, tanto de las que lideramos la empresa como de todos los recursos humanos. Muchas veces nos ha pasado no tener un equipo que estuviera a la altura de los clientes, otras veces salimos a buscar más clientes porque el equipo era demasiado grande, otras veces superamos crisis económicas que afrontaban todos en las que siempre los primeros recortes eran en el área de comunicación. Yo creo que conflictos hay todos los años para superar, porque cuando estás en constante búsqueda de superación profesional, de crecimiento y de nuevos desafíos, siempre hay pequeños conflictos que hay que ir salteando y de los que hay que ir aprendiendo. El día que no tengamos un conflicto será porque nos achanchamos y entramos en una meseta.

Fuente: ON24