15 de julio de 2021
Voluntarios hicieron limpieza en la costa del Paraná y recolectaron 600 kilos de basura
Evangelina Corradi, del Taller Ecologista, habló sobre el objetivo de la iniciativa: "A través de lo hallado la idea es reforzar e impulsar ordenanzas".
Tras no poder realizar la ya tradicional iniciativa en 2020 por la pandemia y las restricciones, voluntarios de organizaciones ecologistas de Rosario realizaron este fin de semana una jornada de recolección y clasificación de residuos en el río Paraná. La actividad se llevó a cabo en tres puntos de la costa de la ciudad, donde se juntaron cerca de 600 kilogramos de basura no orgánica: plásticos, metales y textiles, entre otros residuos contaminantes. En ese sentido, CLG dialogó con Evangelina Corradi del Taller Ecologista, una de las organizaciones participantes, quien habló sobre lo hallado y explicó el objetivo de la iniciativa.
La convocatoria fue impulsada esta vez por la ONG Viernes por el Futuro y participaron un centenar de voluntarios de numerosas organizaciones ambientalistas de la ciudad, quienes se reunieron el sábado por la mañana en tres puntos de la costa rosarina del Paraná: Costa Alta, Rambla Cataluña y el Acuario. Por la mañana se realizó la limpieza y por la tarde se clasificó y analizó lo encontrado.
En primer lugar, Corradi explicó el objetivo de la iniciativa y adelantó que en septiembre se realizará una nueva edición: «Desde Más Río Menos Basura venimos realizando estas jornadas desde 2016, y esta vez fue el grupo Viernes por el Futuro el que tuvo la iniciativa de hacer una previa a la que tenemos pensada para septiembre, ya que el año pasado no lo pudimos hacer por la pandemia. La lógica es siempre la misma: más allá de limpiar, con la actividad se busca concientizar. No vamos a recolectar para limpiar, sino para hacer un análisis de cómo está nuestro consumo como ciudad, qué es lo que más se consume y qué es lo más arrojado».
La voluntaria contó que por la bajante histórica que atraviesa el río el resultado fue diferente y destacó la repercusión que tuvo esta edición: «Al estar tan bajo el río esta vez fue bastante diferente lo que encontramos en comparación con jornadas anteriores». Y añadió: «En esta oportunidad se sumaron voluntarios y voluntarias de toda la ciudad, tuvimos una convocatoria bastante amplia. Calculamos que hubo cerca de cien personas: 20 en Costa Alta, 40 en la Rambla y 40 en el Acuario».
Además, detalló cómo se realizó la limpieza y la clasificación: «Las jornadas siempre tienen dos instancias: a la mañana se hace la recolección y por la tarde todo lo juntado se lleva a un espacio donde hacemos el análisis y la categorización, que en esa oportunidad se realizó en la playa seca al lado de la Rambla. Abrimos todas las bolsas recolectadas y separamos en cajas con categorías: botellas de plástico, textiles, latas y demás. También se hace una división por marcas, para buscar visibilizar cuáles son las empresas que más contaminan».
Sin embargo, fue tal el volumen de basura recolectado que entre los más de cien voluntarios no pudieron clasificar más de una tercera parte: «Fue tanto el volumen que recolectamos que sólo pudimos analizar lo que se juntó en la Rambla, una tercera parte del total aproximadamente. Se recolectaron unos 600 kilos y analizamos 180 kilos».
Según comunicaron los organizadores de la iniciativa, el detalle de lo recolectado en la Rambla fue el siguiente: 18,5kg de botellas PET y tapitas; 6kg de vajillas y descartables; 0,5kg de tetrabricks; 12,5kg de plásticos rígidos; 59 kg de bolsas y envoltorios; 38,3kg de vidrio, 9kg de metales y 8kg de otros materiales.
En la última jornada realizada allá por 2019 lo que más llamó la atención fue la cantidad de latas de cerveza y gaseosa, pero este año fue diferente: «Esta vez encontramos 6 kilos de vajillas descartables: sorbetes, vasos y bandejas. Si uno lo piensa, es un plástico súper liviano, por lo que 6 kilos es un montón. Es un material que se va desgranando y se convierte en microplástico».
«Este año se encontraron muchas latas, pero no fue tan llamativo como en 2019. Durante la colecta evaluamos algunas hipótesis, y una es que al estar tan bajo el río probablemente estén estancadas en algún lado. Tampoco encontramos tanto plástico PET como esperábamos y suponemos que es por la bajante, ya que nunca habíamos hecho una colecta con el río tan bajo», agregó.
Durante la colecta hubo una constante: más cerca de los bares, más residuos. «Cerca de los bares costeros encontramos muchísimas botellas, vasos, sorbetes y bandejas descartables. No sabemos si los tiran, se vuelan o son los propios clientes, pero por ejemplo encontramos vasos con restos frescos de bebidas, lo que da a entender que fueron tirados en los últimos días», indicó.
Como aclaró previamente Corradi, la limpieza es un efecto secundario de la jornada, ya que el objetivo principal pasa por otro lado: «En base a estas categorizaciones que realizamos nuestra idea es reforzar o impulsar ordenanzas que no están o que no están saliendo, teniendo datos regionales y bien actualizados».
Por último, la voluntaria del Taller Ecologista adelantó que en septiembre se realizará una nueva jornada: «Desde Más Río Menos Basura vamos a estar realizando la limpieza que hacemos anualmente el 4 de septiembre».
La iniciativa realizada este sábado fue convocada por la ONG Viernes por el Futuro y participó el colectivo Más Río Menos Basura, que engloba a El Paraná No Se Toca, Ucel, Taller Ecologista y Greenpeace, entre otras organizaciones.
Fuente: Con La Gente