1 de septiembre de 2021
Se celebró el primer Día Nacional de la Persona Donante de Órganos
Impulsado por la familia Trivisonno, cada 29 de agosto buscará darle valor a la vida y solidaridad de los donantes y de sus familias.
Imagen: Prensa Concejo de la ciudad de Rosario
“El Día de la Persona Donante de Órganos surge a partir de nuestra propia experiencia. El 29 de agosto de 1999 nuestra hija Antonella, de seis años, sufrió un accidente de tránsito en la esquina de calles Ovidio Lagos y Salta, de la ciudad de Rosario, y horas después en el Hospital Victor J. Vilela nos dicen que estaba muy grave. Se determina su muerte y en ese momento decidimos donar sus órganos”, comienza en su relato Silvia Trivisonno.
La muerte de la pequeña Antonella significó para sus papás Silvia y Alejandro Trivisonno un duro golpe, pero también fue el inicio de un camino con un destino solidario: fomentar la donación de órganos para salvar vidas. Tanto Silvia como Alejandro se han convertido en un emblema de la donación de órganos en Argentina. En noviembre del 2020, los Trivisonno cumplieron un sueño: se decretó el 29 de agosto Día Nacional de la Persona Donante de Órganos, sumándose a la Ordenanza Municipal de Rosario N° 10.070.
Cuenta Silvia que el 30 de mayo siguiente a la donación de órganos de Antonella, día que se celebra esta acción, desde Cudaio los invitaron a una misa en la cripta de Lourdes y a un teatro de sombras para compartir un momento junto a otras familias donantes. Si bien el mensaje y el motivo fue muy emocionante, al mismo tiempo fue una experiencia en un lugar oscuro y frío, alejado del recuerdo que ellos guardan de su hija. “Ahí entendimos que nosotros donamos sus órganos no por cómo murió, sino por cómo vivió, y lo que queríamos celebrar no era solamente la donación que hizo luego de su muerte, sino las donaciones diarias que hacía con nosotros, siendo eso lo que nos mantuvo y mantiene en estos casi 22 años de trabajo”, agrega.
“Antonella fue donante de vida en vida, desde ese lugar nos mejoró la calidad de vida. Una persona donante de órganos mejora la vida de otro que es un paciente enfermo o terminal. Antonella nos hizo mejores a nosotros cada día por el solo hecho de dar, no lo que a ella le sobra, sino lo que el otro necesita. Yo no te puedo dar un riñón si vos necesitás un corazón, la donación es dar lo que el otro necesita, y eso aprendimos e intentamos contar y transmitir, para que sin tener que vivir la tragedia que vivimos nosotros, puedan entender desde qué lugar existe la donación”, se expresa Silvia.
El Día de la Persona Donante surge como respuesta de la familia Trivisonno a la generosidad y amor que recibieron en estos años de trabajo, desde la solidaridad de los donantes hasta la energía que les dan los trasplantados en sus abrazos. Destacan y agradecen también la cantidad de donaciones que reciben ya sea con remeras impresas o volantes para repartir, diferentes acciones que ayudan a llevar el mensaje y concientizar sobre la importancia de la donación de órganos. “Nosotros no necesitamos dinero, solo que cada uno pueda hacerlo desde el lugar en el que está y difundir esto todo los días”, agrega Silvia.
Esta conmemoración que se celebra desde este 2021 cada 29 de agosto busca darle a las familias la oportunidad de recordar a su familiares de una manera especial, como lo siente la familia Trivisonno con Antonella. “Nosotros recordamos a ella con esa sonrisa que nos regalaba diariamente. Por ejemplo, los padres de Tito, que es un donante pediátrico, lo recuerdan como un superhéroe y comparten con sus amigos la capa que la mamá le cosió. Cada familia quiere recordar a su hijo, hermano o sobrino desde la vida, desde lo que vivió con esa persona, no solamente de lo que hizo cuando murió. Por eso nos parecía que celebrar el día de la persona donante tiene que ver con recordar y celebrar esa calidad de vida que habían tenido los donantes”, explica Silvia.
Este 29 de agosto de 2021 es la primera vez que no hicieron actividades para recordar a Antonella, ya que otras instituciones tomaron la posta. “Desde el Concejo de Rosario pidieron que se izara la Bandera Argentina en el Monumento de la ciudad por el Día del Donante. Invitamos también a los papás de Tito y al hermano, a poco más de dos años de su fallecimiento. Ver su emoción nos hizo sentir que debemos tener la mirada puesta en aquellos que caminan como nosotros, en cada una de las familias del resto del país que tienen donantes anónimos, que por ley no se puede saber quiénes son, pero están sufriendo este dolor de volver a casa y no encontrarse con su hijo”, detalló Silvia.
El Día Municipal de la Persona Donante de Órganos se celebra en Rosario por ordenanza 10.070, norma que antecedió a la ley nacional. “En Rosario el tema de la donación de órganos está instalado. Desde el periodismo que nos acompaña y difunde nuestras acciones, hasta los concejales de distintos partidos que todos los años nos acompañan en plazas o monumentos. Todos de ellos pasan a dar un abrazo y con muchos de ellos hemos transitado mucho tiempo de este trabajo. Este año se sumó el Intendente al izamiento, y la fachada del edificio de la Legislatura de Santa Fe se encendió de naranja durante cuatro días, así que la repercusión es grande y es un desafío hacerlo crecer aún más. Por otra parte, el Incucai compartió un flyer que fue replicado en Tierra del Fuego, y nos llena de orgullo y emoción saber que aunque no estemos o no vayamos a estar en el futuro, este trabajo de concientización va a perdurar en el tiempo”.
“Rosario es una ciudad absolutamente solidaria. Cada vez que hay campaña sabemos que todo el mundo está tratando de ayudar. Queremos también mostrar el mejor lado de la solidaridad, concientizando que no se da lo que sobra, sino lo que el otro necesita. No es dar, es darse. No es mirar lo que me sobra, sino mirar lo mejor que tengo”, concluye Silvia Trivisonno.
Por Matías Zupel | Fundación Rosario
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